Hace algún tiempo me ronda la cabeza la idea de pillarme una vespilla de las antiguas para moverme por Madrid. Siempre me han gustado e incluso estuve a punto de comprarle una PK75 a un chaval de mi cole en COU por 80mil pelas, cuando junté algunas pelillas currando los findes y tal, pero en mi casa me lo prohibieron tajantemente y entonces lo dejé correr. De aquella prohibición y el miedo que me metieron siempre con las motos, no tuve moto hasta los 39 tacos, aunque desde ahí llevo 5 años encantado y subiendo de cilindrada... actualmente con mi querida V 650 k8 que tantas satisfacciones me está dando y que quizá cambie algún día por una KTM 1190

Pero al lío, el tema de tener una vespilla de las de siempre, no de los escutres modernos con forma de vespa, para andar por los madriles con el buen tiempo y dejar el casco atado con la pitón, me sigue atrayendo. Y dado que además las dos vespas que más me gustan son precisamente las menos valoradas por los vespistas, la Cosa y la T5, a veces veo alguna por ahí que podría pillar por 600 pavos o así y es una tentación.
Me gustaría saber si aquí en este foro de expertos moteros, donde muchos habréis probado de todo y seguramente varios habréis tenido alguna vespa, me podéis contar si merece la pena, si acaba siendo realmente incómoda para un uso diario, o si su encanto como vehículo totalmente desfasado técnicamente, pero útil y válido para el tráfico urbano, hacen fácil el cargar con todos sus inconvenientes.
Un amigo que tiene y ha tenido varias vespas me dijo que probablemente a mí ya nunca me gustaría una vespa, porque al haber tenido ya dos escutres modernos 125cc que son el mismo concepto pero mucho más evolucionado (4t, inyección, variador, hueco bajo el asiento, frenos de disco, etc.), ya había probado la evolución lógica de estos vehículos, y sólo con probar una vespa de las antiguas ya me iba a parecer un horror y se me quitarían las ganas.
Probé una vespa y una lambretta hace mil años durante unos pocos metros y en el campo, por lo que no vale como experiencia, me siento totalmente neófito en estos trastos. Pero la semana pasada tuve al lado en 2-3 semáforos un tipo que iba con una Vespa Cosa perfectamente en orden y sonando redonda, y joer, me vuelven a entrar ganas. Además así daría algo de descanso a mi V, que cojo todos los días -y encantado de la vida- para venir a currar, pero le estoy haciendo sobre los 25.000 km al año y me da penilla que vaya envejeciendo tan pronto.
¿Qué opináis?