Obviamente Mili mi fiel compañera va conmigo rumbo a nuestra nueva aventura.
Cómo siempre cruzar la frontera fue un trámite lento, aunque está vez por el papeleo de la Mili, hay que tener certificados médicos, de vacunación, desparasitación y el depósito de 98 soles.
Ya en Perú y luego de andar perdidos en Tacna enfilamos hacia Moquegua, un pueblo andino amable y pintoresco.
Ahí activé mi chip de telefonía peruano el cual había adquirido en Abril, así que ya tengo internet.
Hoy hice el tramo entre Moquegua y Arequipa, bellos paisajes y una zona de niebla intensa y fría.
Arequipa tiene un espectacular casco histórico, solo puedo decir que es bella...
Una ciudad colonial construida de roca blanca volcánica.