pelle escribió:Vamos que yo soy la marca de las motos, y para escuchar estas cosas de mi nuevo producto el cual tengo que vender para poder comer, me da a mi que tampoco se las prestos. Estos si quieren rajar se las buscan ellos por su cuenta.
Yo creo que simplemente es otra manera de ver lo mismo. Me explico. En UK tienen un especial interés por la calidad de los cromados y de cualquier parte metálica susceptible de corroerse. Tal vez paera nosotros sea algo descabellado pero en un país donde llueve muy a menudo y donde la mayoría de las motos duermen en la calle, peus como que tiene su lógica.
Luego son bastante más "atrevidos" (en líneas generales) que nosotros: muchos tienen motos deportivas incluso para hacer de mensakas (con obvias modificaciones en el manillar, etc) y la gran mayoría van relativamente a menudo a circuitos aún sin ser ningunos figuras del pilotaje. Eso hace que se fijen en otros aspectos más extremos cuando prueban motos deportivas.
Por otro lado las naked, aunque parece casi una contradicción por el clima, gustan mucho a los británicos y como moto para prácticamente todo (y habida cuenta del uso "total" que les dan a ellas) sus pruebas son exhaustivas.
Con todo esto no los quiero justificar, cada uno hace las cosas a su manera y cada cual lo interpreta como mejor le conviene, pero sí digo algo realmente a favor de los británicos: igual que no tienen pelos en la lengua para decir lo que creen y no lo dicen a mala fe y sí a la cara, te digo que pese a todo lo que pueda pareer y se quejan de esto o aquello sí que son bastante más abiertos de lo que sus críticas parecen. como ejemplo está Ducati, país que debe ser (EEUU al margen) su 2º ó 3er mercado después del doméstico. Luego dicen lo que dicen porque está ahí pero saben valorarlo todo en su justa medida.
Y de las Triumph les he leído rajar a base de bien... de hecho la única 600 buena que han reconocido tener es la actual Daytona (bueno, y la versión anterior con 600 cc).
Es algo a lo que deberíamos acostumbrarnos en España, a no tener que leer opiniones influenciadas por relaciones comerciales con esta o aquella fábrica. ¿De qué sirve entonces una prueba? Los fabricantes se supone que deben estar orgullosos y satisfechos de su producto y se les puede reconocer cierto derecho a expresar opiniones de maneras más suaves para que no ofendan a nadie, pero en ningún caso omitirlas. De hecho si las fábricas no se ofendieran por las críticas la relación final entre producto y satisfacción al cliente sería mucho mayor a medio plazo...
Bueno, que ya me voy de madre (cómo no). No doy más la lata. Por este post
