
-"En el mapa, sale una vuelta al Moncayo mu majeta".
-"Pues esa misma", dijimos todos.

Así que saliendo por la Ctra. de Logroño, nos desviamos hacia Fuendejalón, Tabuenca, Purujosa, Cueva de Agreda...Olvega y Agreda.



Ya habíamos pasado por la falda Sur del Moncayo, ahora toca almorzar, paramos en Ólvega y nos encontramos que medio pueblo está de Comuniones y los bares con comedor nos "niegan" unos "güebosfritosconjamón", aduciendo mucho "follón" con esto de las Comuniones...
Increible, pero cierto, nos vemos obligados a marchar al siguiente pueblo, esperando menos fervor religioso que en el citado Ólvega y así es...este pueblo si que mola.
Nos paramos a preguntar y nos mandan al Bar Garreto, "donde paran los de las motos".
Allí en la terraza, dos paisanos muy resueltos y satisfechos, nos invitan a chorizo de jabalí, pero no del bar...sino del que cazan ellos. Uno de ellos, tras unos vaciles y comentarios, acaba llevandonos a su lonja, donde de un arcón congelador, nos saca 2 piezas del último jabalí que tenía guardado...
-"Llevaoslo, que así dejo el arcón vacio y lo desenchufo hasta la siguiente temporada..."
-...."Pues venga", no nos costó mucho decidirlo...
Uno de los cachos de jabalí, era un pelín grande y no entraba en la maleta, así que le buscamos una solución "Salomónica"...

Así que con el par de peazos de jabalí y una sonrisa de oreja a oreja, nos hemos vuelto a comer a casita, pasando esta vez por el Norte de la montaña, Tarazona, Borja...
Lo hemos dejado en un restaurante y que nos avisen para cuando lo podamos ir a "liquidar"...
Pero eso es otro capítulo.
